Bajo la lluvia
Hay una historia muy tierna detrás de este dibujo:
Hace un tiempo iba andando por la calle Orense, y empezó a llover de la nada. Una lluvia torrencial, muy fuerte. Toda la gente corría despavorida para ponerse a cubierto, otros abrían el paraguas (Que no entiendo por qué lo llevaban si era un día tan soleado hasta ese momento).
Los comentarios alrededor eran mayormente desagradables. A nadie le hacía ninguna gracia, casi estaban echando la culpa al tiempo por importunarles tan impertinentemente. Yo me puse a cubierto también y me quedé ahí un minuto. La imagen que había delante de mi no podía ser más bonita. Entre tanto odio y malas caras, había una niña de unos 3 o 4 años pasándoselo realmente bien. En mitad de la lluvia, brincando, jugando, chapoteando y bailando (a lo cual, los odiosos comentaristas alrededor, hablando entre ellos sobre la inconsciencia de los padres: "Va a coger una pulmonía... verás luego para lavar las manchas de barro...").
Me ha parecido tan tierno y tan natural que me puse a pensar. ¿Por qué cuando crecemos dejamos de disfrutar así de la vida? ¿Cuándo la preocupación empieza a inhibir la diversión? ¿Esa niña disfrutará igual de un día de lluvia cuando sea mayor?...
Entonces, esta imagen se me formó en la cabeza de forma casi instantánea y la tuve que dibujar.
Lo comparto sólo para pensar:
Seamos un poco más como esa niña y un poco menos como los adultos que refunfuñaban a su alrededor.

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